Calzado de cuero con puntera de metal para trabajos con riesgo de tropiezo y/o caída de objetos contundentes.
Calzado cuero sin composición metálica y suela de material aislante para trabajos eléctricos.
Botas de goma con suela antideslizante para trabajos en medios húmedos.
Calzado ajustado al pie y al tobillo para evitar el ingreso de metales fundidos o líquidos calientes para trabajos con manipulación de dichos materiales.